Recuperando artículo 2 /agosto de 2019
“De crisis peores hemos salido”. Con esa frase positivista
me contesto un votante K
“Lo tuyo puro humo” otro votante K
“Está muy bien, pero piensas que muchos entienden lo que dices?”
Un amigo que me llamo por teléfono, “ellos piensan que el imperialismo viene
por nosotros, nuestros recursos, que se jodan los mercados “
En 1989 cayo el muro
de Berlín, y con ello cayo para el mundo una gran mentira, pero muchos
argentinos siguen pensando que hay un mundo mejor fuera del capitalismo, lo
cierto es que no lo hay. Pero seguimos enfrascados en esas propuestas
revolucionarias de peñas folcklóricas de los 70, cantando a desalambrar
mientras miran su Iphone traído de su último viaje a Miami.
Unos ex ministros del
gobierno de Allende llegaron a Madrid de desbandada y decidieron recorrer los
países de atrás del telón, allá por los 70, una vez de regreso confesaban a un
ex miembro del ERP argentino, “No entiendo que defendemos”, claro, ellos habían
visto la realidad después de 30 años de comunismo Soviético.
Y mientras el
mundo avanza en busca de un futuro mejor, con más expectativas de vida, menos
pobres que nunca, menos hambre que en la historia de la humanidad.
Los argentinos siguen pensando que una gran conspiración
intergaláctica se ciñe sobre sus cabezas, como una luna que los sigue vayan
donde vayan, y no es contra latino América, es contra ellos. Los demás países
de la región lo han entendido, y su salto de calidad ha sido enorme, Chile y
Perú son el mejor ejemplo, aún la Bolivia de Evo Morales lo ha entendido. Pero
nosotros, dale que te dale con el enemigo imaginario. Como en una novela de
Asimov, Trantor es el Imperio y nosotros Terminus un planeta más en un brazo
lejano de una galaxia. Mientras el mundo se hizo global e interrelacionado,
nosotros pensamos que podemos hacer la Gran Muralla China y aislarnos para que
no nos roben los inventos, ni el papel, ni la tinta ni la pólvora. Alguien
debería explicar a los habitantes de nuestro país , que los chinos pagaron
varios cientos de años tal decisión, y nosotros ni siquiera tenemos sus
ventajas tecnológicas históricas.
Un país difícil el
nuestro. Butch Cassidy llego a Argentina en 1901 huyendo de los federales que
lo perseguían por sus delitos en Estados Unidos, había llegado al paraíso de
los delincuentes y dijo: “Curioso este país que los ciudadanos ayudan a huir a
los forajidos y nos ocultan de la policía”. Pasaron más de 100 años, no solo
los escondemos, pretendemos elegirlos para que guíen el futuro de todos los
ciudadanos.
Hemos trastocado
todos los valores de la convivencia, así convertimos en heroico actos
delictivos, nos parece normal cortar una calle, ocupar una propiedad, cobrar un
soborno, sitiar con violencia la máxima institución de la nación, que los
periodistas cobren para hablar bien de los partidos( #sobrecogedor), que
desaparezcan armas del ejército, que los jueces no paguen impuesto ni puedan
justificar su patrimonio, que se le tiren piedras al coche presidencial, que una
luchadora de los derechos humanos a llame a fusilar al presidente, que un
funcionario púbico lleve armas y bolsos con millones de dólares,( producto
de los chantajes), a la madrugada a un convento y podría seguir ….Lo cierto es que
el argentino ha perdido todo capacidad de sorpresa y considera que cualquier
cosa , a fuerza de ser habitual es normal.
Y mientras pasa todo
esto, damos por bueno que podemos pedir ayuda al vecino por que se nos inunda
la casa, y el vecino que solidariamente nos da una mano económica a fuerza de
algún sacrificio personal, luego ve con asombro que nos vamos 30 días a
Brasil mientras aún no le devolvimos su ayuda. Así hicimos con nuestro mega
canje, le dimos a quienes nos prestaron unas sumas ridículas, y luego dijimos que
los fondos buitres pagaban una suma vil a los bonistas, pero nos olvidamos que
pago más que el gobierno. Y lo peor, hacemos estas cosas sin ruborizarnos, y como si fuera un orgullo incumplir con nuestra obligación.
Ahora el mundo nos vuelve dar una mano para atender las
necesidades más urgentes, y aparece un candidato diciendo al mundo, “volveremos
a traicionar vuestra confianza”, pues bien. Hasta cuando piensan los argentinos
que podemos defraudar una y otra vez a los países que se ofrecen ayudarnos. Pero
no, “Hay una conspiración intergaláctica para quedarse con nuestros recursos”.
Mientras repiten esto, ven como una única variable la cotización del dólar, sin
intuir siquiera que eso solo es un síntoma de la gran enfermedad que estamos
incubando. Por que ya nos bajaron el pulgar, y se termina el sueño de un
país integrado al mundo, llevando agua potable, conectividad, rutas y cloacas a
sus habitantes, dando pelea para mejorar la calidad de la educación, luchando
con las mafias que anidan por doquier, peleando contra el narcotráfico.
Mientras algunos se repiten: “salimos de crisis peores”,
quiero avisarles que no, que lo que viene es peor. Aislados del mundo , solo se apuntarán
saqueadores. Vamos derechito a un país sin ley , autoritario, de pensamiento
único.
Que el Cosmos nos
proteja de esta conspiración urgida en Galaxias cercanas y lejanas, por que los
argentinos ya decidieron “Suicidarse en defensa propia”
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